La importancia del factor humano en un entorno digital

La importancia del factor humano en un entorno digital_64da87fc69453.webp

En la última década, el avance tecnológico ha transformado drásticamente la forma en la que se llevan a cabo las tareas laborales en diversos sectores. La automatización es una tendencia en constante crecimiento, impulsada por la capacidad de las máquinas para realizar un mayor volumen de trabajo en menos tiempo.

 

Sin embargo, son muchos los sectores afectados y reacios a la total automatización de sus servicios, como es el caso de Grupo Moure, holding fundado en 1996 con presencia en el sector energético y carwash, entre otros, que engloba las empresas Elefante Azul, Autonetoil, Petronet y Washnet Factory, quienes reconocen que el factor humano sigue siendo fundamental para brindar un servicio excepcional a los clientes.

 

Nuestros empleados desempeñan un papel fundamental en la satisfacción de nuestros clientes, brindándoles un trato personalizado y atendiendo sus necesidades”, asegura Mabel Carrasco, adjunta a dirección & RRHH en Grupo Moure. Y añade: “Creemos firmemente que esta combinación es la clave para ofrecer una experiencia única y diferenciada en cada interacción”.

 

Ya en 2019, el informe de la OCDE de 2019, revelaba que en los próximos 10 años aproximadamente el 14% de los oficios actuales tendrán un alto porcentaje de automatización, mientras que alrededor del 32% experimentarán una automatización parcial, demostrando así la tendencia a un trabajo híbrido entre máquinas y humanos.

 

El valor del factor antes que la automatización

Cabe destacar que las ventajas de las máquinas en este contexto son innegables, la automatización en las gasolineras permite mejorar la velocidad de atención y reducir los errores asociados con la interacción humana. Además, la disponibilidad ininterrumpida del servicio, las transacciones rápidas y seguras, y la capacidad de adaptarse a las preferencias individuales de los clientes son otros beneficios notables.

 

Sin embargo, es importante reconocer que, a pesar de estas ventajas, el factor humano sigue siendo fundamental en cualquier entorno laboral. “Aunque las máquinas pueden agilizar los procesos y aumentar la eficiencia, no pueden igualar la empatía, la intuición y la capacidad de adaptarse a situaciones inesperadas que aporta el personal humano”, defiende Carrasco. “La interacción personalizada, la resolución de problemas complejos y la habilidad para brindar un servicio excepcional siguen siendo aspectos cruciales en la experiencia del cliente”, continua.

 

En este sentido, en los últimos años, Grupo Moure ha experimentado un notable crecimiento en su fuerza laboral. “Desde el año 2015, hemos duplicado el número de empleados, pasando de 50 a 110”, afirma la adjunta a dirección & RRHH en Grupo Moure. “Este aumento significativo en el personal refleja nuestro compromiso continuo de fortalecer nuestra capacidad para atender las necesidades de nuestros clientes y mantener altos estándares de calidad en todos los aspectos de nuestro negocio”, expresa.

 

Por lo tanto, a medida que se avanza hacia un futuro cada vez más digitalizado, Grupo Moure se enorgullece de apostar por la presencia de empleados comprometidos y capacitados. “Nuestro objetivo es seguir evolucionando y adaptándonos a las necesidades cambiantes de nuestros clientes, manteniendo siempre el factor humano en el centro de nuestras operaciones”, concluye Carrasco.

Fuente Original: Aquí

Facebook
Twitter
LinkedIn
Email