“Desde 2020, hemos intensificado nuestra orientación hacia la persona, tanto para residentes como para profesionales“, prosigue Martínez. En ese momento -y tras más de tres décadas de trayectoria-, DomusVi replanteó su estrategia en la gestión de personas, puesto que su foco es “cuidar a quienes cuidan”, lo que también suposo reforzar sus valores, que les diferencia “por poner en el centro a los profesionales de la compañía”. La situación, destaca Martínez, les ha enseñado a “ser más resilientes, a innovar y a priorizar el bienestar y desarrollo de nuestros equipos de profesionales“, quienes comparten la vocación en torno a lo que hacen en su día a día laboral: “Nuestros profesionales deben poseer una dedicación profunda y genuina hacia las personas a las que cuidamos.”
El claim de la compañía, “Humanidad compartida”, ya dice mucho del propósito que comparten todos los que trabajan en ella. Un propósito, apunta Martínez, que se sustenta en valores como “saber cuidar, espíritu pionero, sinceridad de las emociones, confianza compartida y empatía innata” y en cualidades como la humanidad, el respeto y la atención al otro.
“Queremos asegurar que cada acción que se realice beneficie a nuestros residentes, usuarios y usuarias, y motive a nuestros profesionales para que puedan sentirse orgullosos de su trabajo”, subraya Martínez, de ahí que todas las políticas de gestión de Personas de DomusVi giren en torno a esa misión. Una gestión de Personas que se fundamenta en diversos focos que, tal como explica Martínez, “van desde potenciar el interés por trabajar en nuestra compañía para atraer talento a la promoción interna como eje de desarrollo profesional, pasando por la formación interna encaminada a la actualización de conocimientos, competencias y prácticas que aseguran tener a un equipo preparado y solvente”.
Y todavía hay más, porque en el marco de su gestión de Personas, la compañía también trabaja por fomentar la igualdad de trato y de oportunidades y la conciliación, además de ofrecer “beneficios sociales con políticas retributivas que se ajustan a las tendencias de los profesionales sanitarios”. Un despliegue que también pone el foco en el desarrollo y la diversidad, así como “en el desarrrollo de herramientas que liberen a nuestros profesionales de las tareas más básicas para que puedan dedicar más tiempo a los aspectos más importantes y vitales de su trabajo: el cuidado y la atención”, sostiene Martínez.
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